Teoría Ómicron

Revista de ciencia ficción y fantasía

CRONISTA ÓMICRON: Transmisión

T.A Llopis comparte su relato “Transmisión”

Por T.A Llopis

USUARIO: luciwtsan

  PASSWORD: ********

  USUARIO CONFIRMADO: Dra. Lucía Wütend Santateresa.

  ACCESO CON EL EXTERIOR: AUTORIZADO

  INICIANDO TRANSMISION.

  AUTODICTADO: ON.

  José, amor, tranquilízate y conserva la calma. Puedes hacerlo, respira hondo.

  (SILENCIO DE AUDIO:  1…2…3…4…5… 5s)

  Me gustaría darte más tiempo para que te centres, pero tengo que ir al grano. Ha ocurrido.    Sigue exactamente mis instrucciones, tan rápido como puedas. ¡¡Me da igual lo que estés haciendo, sal de la cama joder, vístete ahora mismo y haz lo que te digo, YA!!

  Lo siento, siento haberte gritado. Aquí todo es un caos absoluto. Me cuesta entenderlo incluso a mí, apenas reconozco el lugar al verlo de este modo, también empiezo a tener lapsus de memoria y repentinos cambios de humor, temo que sea un claro síntoma de que ya ha empezado y nos está afectando a los que estamos encerrados aquí. Por favor, sigue mis instrucciones tan rápido como puedas. Puedes pausar el audio cada vez que lo necesites, pero date prisa.

Contén el aliento.

Sal de la cama y vístete con lo primero que encuentres. No des explicaciones a nadie y no pierdas tiempo. Ve al garaje, colócate la máscara de oxígeno que usas para hacer submarinismo y respira normalmente, luego ponte las botellas de oxígeno que usas en la espalda. Al hacerlo, aprieta la máscara tanto como puedas. Sella el borde de la máscara de oxígeno con cinta de embalar directamente sobre la piel de la cara y asegúrate de que no entra nada de aire del exterior a tu boca o nariz. Este último paso es muy importante. Incluso sería mejor si sellaras la máscara de submarinismo con cinta de embalar sobre tu cara… ¡¡Sí, está es una genial idea, hazlo así, contén el aliento, vístete, ve al garaje!! Diría que esto acabo de decirlo… aquí todo es un caos absoluto… me cuesta concentrarme. No pierdas tiempo.

Un momento.

(DETECTADA CONVERSACIÓN CON OTRA PERSONA) Doctorz Zetsubo, por favor, mantén la calma. ¡Zetsubo, no se te ocurra hacerlo! (SONIDO DE MUEBLE ARRASTRÁNDOSE) Baja de ahí, eso es. Muy bien, tranquilo. (FIN CONVERSACIÓN AJENA)

  José, la máscara con cinta sobre la cara, creo que ya te lo he dicho. Supongo que por mucho que te diga que conserves la calma estarás alterado. No te puedo culpar por ello. Ha ocurrido. Oh Dios… creo que esto ya lo he dicho. Vale, me concentro, me concentro. Respirarás aceleradamente aunque te diga que te calmes, así que supongo que tienes unos 45-50 minutos de oxígeno si la bombona de buceo está llena… espero que la rellenaras después de la última vez. Comprueba que no se filtra nada de aire del exterior sobre la nariz o la boca, es muy importante.

Cada vez estoy peor, lo noto. Date prisa. Me queda poco tiempo.

  Sal a la calle y ve a casa de mi hermana Lore. A pie. Ni se te ocurra coger el coche. Tampoco tomes el transporte público, especialmente el autobús, ni mucho menos un taxi. Es más, evita todo vehículo en movimiento por lo que más quieras. Y no te detengas a hablar con nadie. Puede parecer que te encuentras con alguien simpático por la calle que quiera preguntar algo, alguien a quien conozcas con expresión ausente, o gente despistada que parezca estar buscando una dirección, pero tú pasa de largo. ¿Has entendido? No te subas a ningún coche ni vehículo a motor de ningún tipo, sea quien sea quien conduzca, ni te pares a hablar con nadie.

  Como la vez aquella que cuando me saqué el carnet de conducir… me aterraba tener un accidente y me terminaron poniendo una multa por circular por debajo del límite permitido, jajaja, ¿te acuerdas de esto?… no, no me paso a mi… pero tu si estabas… ¿no estaba Lore también?… Lore, aún no me lo puedo creer…


Más sobre TEORÍA ÓMICRON


  Oh Dios, creo que por un momento se me fue la cabeza. No sé durante cuánto tiempo podré seguir con esto. Mierda José, corre todo lo que puedas, date prisa. Veas lo que veas. Hagan lo que hagan los demás, no te pares a socorrerlos ni hables con nadie.

  (CONVERSACIÓN CON OTRA PERSONA) Zetsubo, Zetsubo ayuda a Ana, luego venid aquí los dos. Tranquilos. Eso es. ¿Ana?, ¡Ana!, soy yo. Zetsubo, quédate con ella. (FIN CONVERSACIÓN AJENA) Mierda, Ana  ha dejado de hablar. Solo sonríe. Sonríe… Que maja… ¿Quién es esa chica tan simpática?… jejeje… como saluda con la manita.

  Esto cada vez va a peor. Me cuesta concentrarme, ¡apresúrate! Cuando llegues a casa de Lore y Óscar, ve al jardín trasero. Dónde la gente normal tiene una piscina, un pequeño huerto, o una barbacoa, este policía chiflado de las conspiraciones tiene un refugio nuclear, ¿recuerdas? Cuando agarraba una teoría que le llamara la atención, parecía no existir nada más para José, ¿te acuerdas Óscar?, cómo cuando se obsesionó con que Paul McCartney no era Paul McCartney.

  Joder, ese eres tú Óscar. No, José. José eres tú, mi marido. El policía, ¿o el policía era Óscar?

  Tengo que concentrarme. Me queda poco tiempo. Tengo que medir muy bien mis palabras.

  Escucha. Óscar tiene una manzana… ¡no, no, lo que tiene es un puto refugio nuclear!. Entra. Cierrr… cierraaapordentro. Faltapoco. Falta ppooco. Concentrate Lucía. Activa el bloqueo… de puerta. Aire limpio para … 7 días… días ¿Qué día es? Estos pinos… ¡estos refugios, joder, quiero decir estos refugios!, son herm… herméticos. Comida. Agua. Baño. Cama. Llama… llámame cuando, cuando… ¡cuando estés! Asegúrate de cerrar bien.

  (SILENCIO DE DICTADO 1…2…3…4 RUIDOS / VOCES ININTENIGIBLES…  SILENCIO DE DICTADO 1…2…3…4…5s…1…2…3…4…5min…10min…13min…SONIDO BRUSCO… RUIDOS/VOCES ININTENIGIBLES…14MIN)

  (FIN DE SILENCIO: 14MIN,37S)

  ¡No!, Zetsubo, ¿Qué demonios has hecho?, no… Zetsubo (SONIDO DE LLANTO) Y la chica… una chica… hola, ¿tu quien eres?, que simpática, como hace con la manita y sonríe jeje. Y usted, joven, ¿usted la conoce?, no sea tímido, baje de ahí y dígale algo, hacen buena pareja… pareja. ¡Pareja!. Tengo que esperar a que mi pareja José llegue al refugio para activar la grabación que preparé antes de empezar a transmitir, antes de empezar a perder la cabeza. Lucía, concéntrate, ya falta poco.

  (SILENCIO DE DICTADO 1…2…3…4…5s…1…2…3…4…5m…10m…15m…20m…25m…27m)

  (SONIDO DE UN TELÉFONO MÓVIL)

  P…por… fn… fin… n.

  (JADEOS / MURMULLOS INCOMPRENSIBLES) (FIN DE SILENCIO: 27MIN,18S) (SONIDO DE APRETAR UN BOTÓN) (DETECCIÓN DE UN MENSAJE DE AUDIO ENVIADO.  GRABACIÓN ENVIADA A DESTINATARIO Y A CENTRAL. REPRODUCCIÓN DEL MENSAJE ENVIADO)

  José, antes de llamarte hace un rato, grabé este mensaje para ti. Pensé qué si lo hacía después, ya sería tarde para mí y ya no podría hacerlo.

  Esposo. Ha ocurrido el peor de los escenarios posible. Puede que nuestro objetivo en el laboratorio fuera noble, pero nos cegó la ambición y elegimos los métodos incorrectos, suministrados por las personas incorrectas. Pero me estoy adelantando. Siento los primeros síntomas, tratar de grabar esto me cuesta horrores, debería ir más al grano.

  Como ya te conté una vez, la premisa era bien sencilla: elaborar un microorganismo con ADN vírico que recreara el deterioro cognitivo y la demencia en el ser humano, aislarlo en un laboratorio, y realizar un procedimiento de bioingeniería médica inversa que nos permitiera encontrar una cura en un entorno artificial y controlado en el laboratorio. De haber tenido éxito, habría sido un gran bien para mucha gente, puede que incluso lográramos desentrañar algunos secretos de la mente humana, de la memoria, de la química cerebral que hace que cada uno de nosotros sea quien es. Era un proyecto ambicioso, bien intencionado, en el que la doctora Ana Young, el doctor Rupert Zet… Zetsubo, y yo misma poníamos las ganas de trabajar, mientras que Industrias Alexander Malvakian ponía los juguetes y pagaba las facturas.

  ¿Cómo imaginar que nos darían la espalda si todo salía mal?, ahora me doy cuenta de lo evidente que era. Y mira que Lore y Óscar, e incluso tú mismo, me lo dijisteis: No se puede confiar en Industrias Alexander Malvakian.

  Recreando el deterioro cognitivo con el virus, algo salió terriblemente mal y el microorganismo se propago al exterior. He oído a gente en los pasillos diciendo que estábamos siendo atacados por el grupo terrorista SEIS y que ellos han liberado el virus adrede, aunque mucho me temo que todo ha sido un error humano, y la noticia de que hemos sido atacados por SEIS sea un esfuerzo de Industrias Alexander Malvakian por salvar las apariencias si la noticia se filtra al exterior. Pero qué más da si tan pronto se activó el protocolo de ataque terrorista, el laboratorio quedó sellado con nosotros dentro y expuestos a contagio directo. Además, una caja de metal con un respiradero no puede impedir que el microorganismo se propague al exterior.

  Mientras grabo todo esto, Zetsubo se ha subido a la mesa de laboratorio con ayuda de un taburete, y ha intentado ahorcarse de una tubería con su corbata. He podido llegar a tiempo de impedirlo, pero Ana ha dejado de hablar y creo que ha perdido su capacidad motora. Supongo que cada persona tiene una sensibilidad distinta al microorganismo. La doctora Young se ha hecho sus necesidades encima, y solo sonríe, saludando con la mano. Así es como terminaremos todos en el plazo de entre uno y tres días: con dependencia física total, incapaces de hablar, incontinentes, tan deteriorados mentalmente que apenas ni siquiera podremos reconocer nuestro propio reflejo. Sin sufrir ni padecer, cascarones vacíos hasta la muerte. El microorganismo ya debe estar propagándose en el exterior, y solo parará cuando no encuentre más huéspedes que infectar. Cosa que ocurrirá en cuatro o cinco días. Para entonces, todos estaremos irremediablemente idos.

  Todos salvo la directiva más alta de Industrias Alexander Malvakian y algunos de sus matones armados que les hace de personal de seguridad, que se han encerrado en una cámara hermética preparada para estos casos.

  Y tú, amor mío.

  Sé que asaltaste a mi hermana cuando se emborrachó en las pasadas navidades. No fuiste al baño de su habitación para ayudarla, sino a forzarla. La chantajeaste con qué si no se acostaba contigo, le dirías al ceporro de su marido que ella estuvo de acuerdo. La cámara que tienen para vigilar al bebé captó movimiento y te grabó violándola. Ana borró el vídeo del aparato, pero me enseñó una copia a principio de año. Desde entonces sigo tus pasos para encontrar el modo de darte tu merecido. Incluso descubrí que hoy descubrí que habíais quedado en cuando me fuera a trabajar esta mañana, por eso sé que aún estabas en la cama cuando te llamé.

  El mundo se va al infierno, en seis días, el virus se habrá propagado por todo el globo, infectado a todos, y desaparecido. Lástima que la humanidad tenga que llegar a su fin para que yo vea cumplida mi venganza.

  Dentro de una semana, cuando la irreversible cuenta atrás del refugio dónde estás encerrado se habrá, el mundo entero será una inmensa roca llena de humanos dementes, vacíos de alma, babeando y balbuceando mientras mueren de hambre, salvo tu y la cúpula de Industrias Alexander Malvakian, que seguro han interceptado este mensaje y saben que estás al corriente de todo.

  Por lo que sus matones  te perseguirán y acabarán contigo tarde o temprano, para evitar tener cabos sueltos… por si acaso. No sin antes llevarte a su “sala especial de interrogatorios” que todo el mundo sabe que está escondida en el sótano, para comprobar cuanto sabes.

  Diviértete.

(FIN DE MENSAJE ENVIADO) (SILENCIO DE DICTADO 1…2…3…4…5s …1…2…3…4…5m …10m …15m …20m …25m …30M …40M …50M …1H. FIN AUTOMÁTICO DE TRANSMISIÓN)

Foto: The Hillary Clarck in Pixabay

T.A Llopis

Podríamos comentar lo típico en estos casos. Que nací en Menorca el 25 de agosto de 1981, y a partir de aquí elaborar un extenso currículum tirando a pesado que realmente no es muy interesante y que podríamos resumir en tres puntos: entré como voluntario en la Cruz Roja tan pronto tuve la edad, que estudié y trabajé en terapias naturales y como auxiliar de enfermería, y por último que viví en Barcelona, luego en Murcia, de vuelta a Menorca, y ahora Barcelona otra vez. Y ya está, esta es la parte aburrida.

Aunque bueno, en algún momento de todo lo anterior conocí a mejor amiga y actual compañera de vida, tan aburrido no sería.

Lo realmente bueno, empezó cuando apenas tenía siete años… puede que incluso antes.  En pocas palabras, descubrí que me encantaba leer.

De algo tan “simple” surgió el placer de imaginar historias y escribirlas. Parece poca cosa, pero… ¡ahí es donde empezó todo!, porque he estado escribiendo casi toda la vida desde entonces, por el simple placer de hacerlo.

Hasta que pensé: “¿y si comparto esto con otros?”.

Desde entonces, publiqué en ciao.es, elojodeuk.com, y la revista “Rebelión Galáctica”.

Ah, y estoy escribiendo una novela.


Anuncio

Descubre más desde Teoría Ómicron

Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

Sigue leyendo